Finalidad
Liberar trabas
para que nuevas y mejores posibilidades de trabajo y negocios
se generen en su vida.
Elementos
Vela amarilla
Cono de incienso
Ralladura de cáscara de limón (secada al sol)
Cerillas o mechero
Aceite de jazmín
Realización
Para este ritual, debes rallar la cáscara de medio limón y dejarla secar al sol.
Cuando esté bien seca, se guarda en un frasquito con tapa.
Luego se echan tres dotas de aceite jazmín sobre el incienso nuevo, esperando unos minutos para que chupe el aceite y, después, se prende y se echa encima un poquito de la ralladura de limón para que se queme sobre el incienso.
Inmediatamente se enciende la vela amarilla, en la que escribes previamente tres objetivos concretos de prosperidad personal.
Por ejemplo: conseguir un ascenso, concretar un negocio, comprar un bien.
Te quedas concentrada mientras la vela y el incienso arden pensando en lo que has puesto y visualizando como se realizan tus deseos. Cuanto más tiempo dediques a esa realización más fácil será luego en la vida real.