Se dice, se comenta, hablan.... que todo lo que necesitamos saber lo tenemos al alcance de la mano, aunque no podamos acceder a ello. Porque está en un nivel superior, nuestra alma ya lo sabe;pero, o porque no somos capaces de asomarnos al corazón, o porque no conseguimos alejarnos de emociones o pensamientos aprehendidos; no conseguimos nuestro propio consejo claro.
Ante ello, cuando te surja una duda, piensa tu pregunta ( de forma clara y sin rodeos), concéntrate en ella, y luego mira las señales que hay a tu alrededor. Puede ser el + de la farmacia, o un NO gigante de un cartel ( a la guerra, a las pieles, a la carretera de enfrente).
También puedes coger un libro, un periódico, un medio escrito en definitiva; abrirlo por cualquier sitio y señalar con el dedo una frase. Léela, es tu mensaje.
La biblioteca está a tu alrededor, es tu mundo, y tu mente la que plantea el epígrafe.
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